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El blog de Nordic Oil explora cómo el cannabidiol (CBD) y la aspirina podrían interactuar al compartir mecanismos de metabolización hepática, especialmente mediante encimas del sistema CYP450. En su análisis se advierte que tomar CBD junto con aspirina podría aumentar el riesgo de sangrado, ya que ambos pueden afectar la coagulación, y que el CBD podría alterar la intensidad del efecto de la aspirina al modificar su degradación en el hígado.
También se menciona que, en estudios farmacológicos, dosis altas de CBD pueden competir con otros medicamentos por la misma vía metabólica, provocando que unos queden más activos de lo previsto o más tóxicos. En este sentido, el artículo insta a tener precaución al combinar CBD con antiinflamatorios, anticoagulantes o fármacos hígado-metabólicos.
Aunque el tono es cauteloso, el texto deja claro que hay vacíos en la evidencia: muchas de estas advertencias provienen de ensayos in vitro o estudios con animales, no siempre confirmados en humanos.
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